El Tribunal Oral en lo Criminal (TOC) 2 condenó a Maximiliano Joel Benítez, quien pertenece a la UTOI de la fuerza policial, por el homicidio culposo en el que perdió la vida su sobrino. La sentencia impuso una pena de tres años de prisión y una inhabilitación especial de diez años para ejercer su profesión y portar armas de fuego.

En la madrugada del incidente, el imputado declaró que estaba limpiando su pistola reglamentaria cuando esta se disparó, y la bala alcanzó al pequeño en el cuello.

A pesar de los intentos por reanimar al menor, perdió la vida, lo que llevó a la justicia a ordenar una autopsia, pericias balísticas y un dermotest para determinar la presencia de residuos de pólvora tanto en el sospechoso como en la víctima.

Sin embargo, las pruebas y testimonios recabados durante la investigación pusieron en tela de juicio la versión presentada por el acusado.

La familia de Demian aseguró que Benítez había tenido la intención de asesinar a su sobrino debido a conflictos familiares.

Recientemente, se llevó a cabo un juicio abreviado, y este martes el tribunal decidió condenar al agente, determinando que el hecho fue accidental, aunque no cumplirá su condena en prisión.

Esta decisión se fundamenta en que la pena impuesta es igual o inferior a tres años, permitiendo así que la defensa solicite la excarcelación del condenado.

Además de la condena, se estableció una inhabilitación de diez años para portar armas de fuego y ejercer su función policial.