La intervención se originó a partir de una alerta del Servicio Local, que advirtió sobre las malas condiciones de vida y la falta de asistencia escolar de los chicos. La investigación, encabezada por la UFI N° 8, determinó que los niños y adolescentes eran víctimas de explotación. Tras el operativo, quedaron bajo resguardo de un familiar y fueron trasladados para la realización de la Cámara Gesell.

Ante la gravedad del caso, se coordinó un despliegue que incluyó a la secretaría de Seguridad de Quilmes, la Comisaría de la Mujer y la Familia, la Oficina de Ciberpedofilia y los Grupos Tácticos Operativos (GTO). En total se concretaron seis allanamientos de urgencia en distintos puntos del distrito, donde se detuvo a los principales sospechosos identificados en las declaraciones de las víctimas.

Durante los procedimientos también se secuestraron dispositivos digitales que serán peritados como parte de la investigación. Los detenidos fueron imputados por abuso sexual agravado, corrupción de menores agravada y facilitación de la prostitución de menores.

Las autoridades remarcaron que la prioridad estuvo en garantizar la seguridad de los chicos y que ya reciben asistencia y contención para salir del contexto de vulnerabilidad en el que se encontraban.